Abasolo, Gto. 22 de diciembre de 2023.- Dibujando una sonrisa en su rostro, Paloma Yadira Remigio Vázquez, maestra USAER en la primaria Miguel Hidalgo, cuenta cómo nació en ella el gusanito por la educación especial, rama a la que tiene dedicándose ocho años, a través de los cuales ha podido recoger grandes satisfacciones al ser testigo de los avances, a veces pequeños pero significativos, de sus alumnas y alumnos.
Para Paloma Yadira todo comenzó cuando en su etapa estudiantil tuvo contacto con un niño con síndrome de Down, el cual, desgraciadamente, era discriminado; en ese momento desconocía que había una carrera de educación especial, por lo que, tras investigar un poco, ingresó a la Normal oficial de Irapuato.
“Entré si saber de qué se trataba, pero conforme fue pasando el tiempo, me fui enamorando de la gente, de las personas, de las niñas y niños. Ver como socializan, como los juntan, como son aceptados y juegan, son reconocimientos internos que se agradecen”.
Originaria de Irapuato, Paloma es una de las tres maestras USAER (Unidades de Servicios de Apoyo a la Educación Regular), aparte del psicólogo y el maestro de comunicación que laboran en la escuela primaria urbana no. 2 Miguel Hidalgo en Abasolo, cada una con 27 menores a su cargo.
Remigio Vázquez, señala que, para ellas, ya quedó erradicada la dinámica en que los maestros de educación especial sacan a los alumnos de su salón y los llevan al aula USAER.
“Ahora entramos a grupo, por eso es por lo que las niñas y niños nos conocen y nos identifican más, nuestro trabajo se centra dentro del aula; no excluimos a nuestros estudiantes a un aula especial, entramos, enseñamos al maestro que hay diferentes maneras de enseñar y proporcionamos material”.
Como parte de las dinámicas de inclusión y sensibilización, se han trabajado diferentes dinámicas en las que están conociendo el lenguaje de señas, del cual ya saben algunas palabras, días de la semana, nombre; se realizan también actividades en sillas de ruedas, se tapan los ojos, esto con el objetivo de ponerse en los zapatos de los demás.
A su vez, reconoció el trabajo en conjunto que se realiza en la primaria Miguel Hidalgo, ya que el cuerpo docente y las y los estudiantes, tienen una gran disposición para colaborar y aprender juntos.
Agregó, “es una escuela que está muy consciente de la inclusión, a la hora del recreo, en actividades, las alumnas y alumnos no excluyen, al contrario, los invitan y juntan y juegan. Es un trabajo en comunidad, no exclusivo del aula USAER”.
En la institución, se tienen niñas y niños integrados con diversas discapacidades como síndrome de Down, autismo, discapacidad intelectual y motriz, por lo que la labor que realizan las maestras USAER, más allá de la atención personalizada con los pequeños canalizados, se enfoca también en generar consciencia en la comunidad estudiantil, para evitar la exclusión por parte de sus demás compañeros.