Guanajuato, Gto., 17 febrero del 2018.- El Gobierno de Guanajuato a través del Instituto de Ecología del Estado (IEE) cerró el 2017 con la atención de un total de mil 744 trámites de impacto ambiental, de los cuales, 89 son proyectos de iniciativa privada y Obra Pública.
El director general del IEE, el Dr. Juan Ángel Mejía Gómez preciso que “toda persona física o moral que pretenda desarrollar una obra o actividad ya sea pública o privada y que pueda ocasionar un impacto en el medio ambiente, son quienes tramitan el impacto ambiental, continuó.
“Dentro de este esquema que se continúa de manera permanente por más resultados en compensaciones que beneficien en acciones a favor de las Áreas Naturales Protegidas del estado por medio de proyectos de conservación de suelo y agua, como en su repercusión a favor de cada guanajuatense y el equilibrio natural”, expuso.
Tan sólo en el 2017, las compensaciones beneficiaron 20 Áreas Naturales en el alcance a 667.01 hectáreas, con obras de reforestación de árboles, plantación de nopales y magueyes, acciones de conservación de suelo y agua, provenientes de 77 empresas.
El impacto ambiental es la transformación, modificación o alteración de cualquiera de los componentes del medio ambiente (biótico, abiótico y humano) como resultado del desarrollo de un proyecto en sus diversas etapas, de ahí la importancia de estar atentos y con acciones por la compensación responsable de persona física o moral que realiza procesos que impactan al medio ambiente.
La Evaluación del Impacto Ambiental es un proceso técnico / jurídico / administrativo que tiene por objeto la identificación, predicción e interpretación de los impactos ambientales que un proyecto o actividad produciría en caso de ser ejecutado, mediante la valoración, corrección y prevención de los mismos, todo ello, con el fin de ser aceptado, modificado o rechazado por parte de los distintos órganos de la Administración Pública.
Cabe hacer mención, que se busca asegurar que el proceso de evaluación de Impacto Ambiental esté definido como un instrumento preventivo de gestión, destinado a identificar y corregir con anticipación los impactos ambientales negativos derivados de acciones humanas, y optimizar aquellos de carácter positivo concluyó el funcionario.