Xichú, Gto. 1 de julio del 2019.- Las acciones de combate al vector que trasmite el dengue, zika y chikungunya se intensificaron en la Sierra Gorda de Guanajuato, concretamente en el municipio de Xichú.
Más de 2 toneladas de cacharros fueron retirados de diferentes puntos de este municipio, uno de los más apartados de la capital de Guanajuato.
Con la premisa de que todos somos brigadistas, el secretario de salud Daniel Díaz Martínez hizo un reconocimiento a la población de este municipio por su sumarse a la estrategia de eliminación de cacharros, llantas, recipientes, cubetas en desuso y otras cosas que pueden ser criaderos del vector Aedes Aegypti.
Personal de la Jurisdicción Sanitaria II del área de promoción a la salud con cabecera en San Miguel de Allende se sumó a esta jornada de limpieza masiva, además los pobladores trasladaron llantas en camionetas y eliminaron cualquier nicho que represente la preparación el mosco.
Cabe mencionar que sin criaderos no hay mosco, y sino hay mosco no hay dengue, por eso la importancia de este tipo de actividades en prevención y promoción a la salud.
La humedad y calor hacen que las condiciones climatológicas sean favorables para la reproducción del Aedes Aegypti y Xichú no está exento de este fenómeno.
Hoy 18 municipios de Guanajuato se mantienen con vigilancia especial de manera que suman 13 mil 482 ovitrampas colocadas entre estos puntos.
La mejor estrategia de combate es seguir el voltea, tapa, lava y tira, sobre todo en los traspatios de las casas.
En resumen, las estrategias a seguir desde casa son:
Patio limpio, que consiste en la eliminación de los criaderos de larvas en las viviendas, se organizan campañas de eliminación de cacharros, en la cuales interviene toda la población a través de la estrategia de “Participación Comunitaria”.
La Secretaria de Salud por su parte, realiza actividades de control larvario para evitar la proliferación de larvas en los hogares, mediante la visita de casa por casa de personal adscrito al programa de dengue, los cuales eliminan y destruyen los criaderos improvisados y aplican sustancias químicas que impiden el crecimiento de larvas en los depósitos de agua que se utilizan para la realización de las actividades diarias.
Esta actividad es complementada por la nebulización que consiste en la aplicación de insecticidas, con maquinaria pesada y portátil para disminuir las densidades de mosquitos infectados en el interior de las viviendas. Siempre deberán aplicarse simultáneamente con las acciones de eliminación de larvas, con amplia cobertura y un máximo de tres semanas.