Aplican prueba Planea para bachillerato
• Participan más de 50 mil alumnos de escuelas de Guanajuato
• La evaluación retoma fortalezas de pruebas como Excale y ENLACE
Del 18 al 20 de marzo se aplica el instrumento de evaluación 2015 del Plan Nacional para las Evaluaciones de los Aprendizajes (Planea) para la educación Media Superior.
En Guanajuato, participan 784 Escuelas y 50,798 alumnos de instituciones públicas y privadas del último grado de Nivel Medio Superior.
La prueba es presencial, coordinada por la Subsecretaría de Educación Media Superior y Superior y los diferentes Organismos Públicos Descentralizados del nivel medio superior.
En la evaluación formativa censal de las competencias disciplinares básicas de la Educación Media Superior (Comunicación, matemáticas y una muestra de ciencias) participarán en el país 1 millón 135 mil 282 estudiantes del último grado en alrededor de 14,360 planteles educativos de los sistemas público -estatal y federal-, privado incorporado y autónomo.
El Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE) diseñó y pone en operación Planea, cuyos instrumentos se aplican en el presente ciclo a los alumnos de tercero de preescolar, sexto de primaria, tercero de secundaria y del último grado de bachillerato, de manera coordinada, entre este Instituto, la Secretaría de Educación Pública (SEP) y la SEG en la entidad.
Los propósitos centrales de Planea son:
• Conocer la medida en que los estudiantes logran el dominio de un conjunto de aprendizajes esenciales al término de los distintos niveles de la educación obligatoria.
• Ofrecer información contextualizada para la mejora de los procesos de enseñanza en los centros escolares.
• Informar a la sociedad sobre el estado que guarda la educación, en términos del logro de aprendizaje de los estudiantes.
• Aportar a las autoridades educativas información relevante y utilizable para el monitoreo, la planeación, programación y operación del sistema educativo y sus centros escolares.
Planea inicia a partir del ciclo escolar 2014-2015 con la evaluación de competencias de Lenguaje y Comunicación y de Matemáticas, así como de habilidades relacionadas con la convivencia escolar, en sexto de primaria, tercero de secundaria y el último grado de educación media superior. Progresivamente se incorporarán al esquema de evaluación otras áreas de aprendizaje como Ciencias y Formación Ciudadana.
Las evaluaciones nacionales de logro deben cumplir con los criterios técnicos que aseguren que sus resultados sean válidos y confiables. Especialmente se cuidará su validez cultural y la contextualización de sus resultados. Asimismo, es importante señalar que estas evaluaciones de logro no están diseñadas para evaluar la calidad educativa de los planteles o el desempeño de sus docentes. Tampoco deben usarse para premiar o castigar a estudiantes, docentes o escuelas.
El INEE definirá criterios específicos para la aplicación de las pruebas censales y uso de los resultados. Uno de estos criterios indica que los aplicadores de las pruebas deberán ser externos al centro educativo correspondiente; además, supervisará los procesos asociados a la aplicación de las pruebas, así como realizará una verificación estadística de la consistencia de los resultados.
Planea está conformado por un conjunto de instrumentos para evaluar aprendizajes cognitivos y no cognitivos. Los primeros derivan del currículum nacional vigente de la educación básica y del marco curricular común de la educación media superior. Los segundos están orientados a evaluar aspectos sociales y emocionales, así como valores y actitudes.
Esta evaluación retoma las fortalezas de otras pruebas como Excale y ENLACE, para superar sus limitaciones.
Especialistas externos a petición del INEE, luego de un análisis expusieron que Excale tuvo la virtud de evaluar periódicamente el aprendizaje de los estudiantes de manera válida, confiable y estable, pero que sus resultados tuvieron poca visibilidad social e insuficiente presencia en la toma de decisiones de política educativa.
Por su parte, las fortalezas de ENLACE radicaron tanto en haber dado información sobre los resultados de aprendizaje a nivel de alumno y de escuela, como en que éstos fueron utilizados en alguna medida por las autoridades para definir programas e intervenciones de política educativa; sin embargo, algunos de los usos que se hicieron de los resultados de esta prueba (rankings de escuelas y otorgamiento de incentivos económicos a los docentes) provocaron que el indicador de aprendizaje se desgastara al igual que la incipiente confianza y credibilidad en esta evaluación, por parte de distintos actores sociales y educativos.