200aniversario

Encabezan mujeres guanajuatenses la firma simbólica del acta de Independencia

Guanajuato, Gto., septiembre 13 de 2021. Mujeres funcionarias de los 3 órdenes de gobierno, así como integrantes de los distintos sectores de la sociedad, lideresas de nuestro Estado, encabezaron el evento “Mujeres construyendo la Grandeza”, en el marco de la conmemoración de los 200 años de la Consumación de la Independencia.


El Museo de la Alhóndiga de Granaditas, fue el recinto donde se reconoció y rindió un homenaje a las mujeres, quienes con su participación y lucha, contribuyeron a la gesta de nuestra Independencia.


La Secretaria de Gobierno, Libia Dennise García Muñoz Ledo, enfatizó el papel de las mujeres durante la Independencia.
“Reconocer la participación de las mujeres en la gesta de nuestra independencia debe iniciar por reconocer y visibilizar que antes del grito de Hidalgo, la aventura insurgente comenzó con los tacones de las chapinas o las chinelas de nuestra heroína. Hoy estamos reunidas para conmemorar que la cabalgata de Allende, el grito de Hidalgo, la campaña de Morelos, la gesta de Mina, la lucha de Guerrero y la victoria de Iturbide comenzaron con los taconazos de doña María Josefa Crescencia Ortiz Téllez Girón, el nombre completo de nuestra heroína”.


Dijo que al igual que aquellos taconazos que anunciaban que la conspiración había sido descubierta, hoy resuenan fuerte las voces de todas las mujeres.


“Estoy tan orgullosa de tener aquí, en este acto tan significativo a mujeres que han andado caminos que no siempre han sido fáciles, en espacios de servicio y de mando, de toma de decisiones y de lucha, en este recinto donde hace casi 211 años se libró la primera batalla, nos encontramos mujeres que representamos a los 3 poderes en los 3 órdenes de gobierno, magistradas y juezas, legisladoras locales y federales, presidentas municipales, regidoras y sindicas, abogadas, maestras, doctoras, empresarias, secretarias de Estado, rectoras de universidades, autoridades electorales, dirigentes de organizaciones civiles, lideresas de la comunidad LGBT, activistas”.

El Alcalde de Guanajuato, Alejandro Navarro Saldaña, destacó en su mensaje la labor de las mujeres en la grandeza de nuestro país.

“Hoy México y Guanajuato cuentan con grandes mujeres que están haciendo una inmensa labor par impulsar a nuestros municipios, a nuestro Estado y por supuesto a nuestro País. Todas ustedes, son un claro ejemplo de cómo todas desde la política, desde la sociedad civil, desde las instituciones y desde el sector privado se esfuerzan para hace grande a México y construir un mejor futuro para nuestras hijas y nuestros hijos”.


Durante el evento, todas las presentes firmaron el acta simbólica de Independencia para recordar y reconocer a aquellas que fueron borradas de la historia.


“Quisimos además firmar de manera plural y representativa el acta de independencia, ¿Por qué lo hicimos así? Porque tenemos el derecho y la obligación de hacerlo, porque con nuestra firma reivindicamos el derecho que nos fue negado hace 200 años por las circunstancias, pero con este acto de justicia, renovamos nuestro compromiso con los siguientes 200 años de historia de México, de ser dirigentes, artífices y operadoras de los cambios que se requieren, de darnos aliento y encontrar la fuerza juntas, para seguir este camino que aún no esta exento de discriminación y exilio de nuestras causas”.

Posteriormente se realizó el Conversatorio “Mujeres Construyendo la Grandeza. Historia y Presente a 200 años” moderado por Anabel Pulido López, Directora General del Instituto para las Mujeres Guanajuatenses.


El panel estuvo integrado por Paola María Trujillo Hernández, Cronista del municipio de Silao, Eva Julissa Hernández Luna, Titular del Archivo General del Poder Ejecutivo de Guanajuato y por el Cronista de la Ciudad de Guanajuato, Eduardo Vidaurri Aréchiga.


El Conversatorio tuvo por objetivo, hacer un reconocimiento a la contribución social, historia, educativa, económica, y políticas de las mujeres en un acontecimiento de suma trascendencia para nuestro país y por supuesto para nuestro Estado: la lucha por la Independencia.

Consumación de la Independencia

En Guanajuato, corazón de México, se inició uno de los movimientos más importantes de la historia nacional; a 200 años de la Consumación de la Independencia de México. Nuestra entidad sigue siendo la Grandeza de México.

Tratados de Córdoba

Los Tratados de Córdoba firmados el día 24 de agosto de 1821 por el Jefe Superior de la Nueva España Juan O’Donjú y Agustín de Iturbide comandante del Ejército Trigarante, ratificaron lo planteado en el Plan de Iguala, es decir, “se reconocieron los territorios que pertenecieron anteriormente a la monarquía y se instauró una nación soberana e independiente como Imperio Mexicano”.

464 años de Guanajuato Capital

Guanajuato Capital celebra 464 años de la llegada de la imagen de Nuestra Señora de Guanajuato, así lo explica el Cronista de la Ciudad, Dr. Eduardo Vidaurri Aréchiga.

San Ignacio de Loyola

La tradicional fiesta de San Ignacio de Loyola, el día de la Cueva, se celebra en la ciudad de Guanajuato dede hace más de 400 años y esto debido a que fue Guanajuato la primera población en el orbe que designó a Ignacio de Loyola como su santo patrono protector.

Agustín de Iturbide en Guanajuato

Bicentenario de la Consumación de la Independencia Nacional

Una charla sobre algunas de las actividades desarrolladas por Agustín de Iturbide en la intendencia de Guanajuato durante la guerra de Independencia

FL Noticias con Carlos Olvera

¿Sabes cuál fue el papel de las mujeres en la gesta de Independencia?

Eduardo Vidaurri Aréchiga

Cronista de Guanajuato Capital

No solo ahora, sino en cada momento decisivo en la historia del país y del estado, ??las mujeres han jugado un papel fundamental, aunque poco reconocido; aquí el cronista de Guanajuato capital Eduardo Vidaurri revela momentos clave, ? que tuvo la participación de las mujeres en el movimiento de la Independencia Nacional.

Mujeres en la Independencia 2

José Eduardo Vidaurri Aréchiga

Cronista municipal de Guanajuato

En esta segunda entrega continuamos con el reconocimiento de la histórica participación de las mujeres en todos los procesos de la historia y de manera específica en la construcción de nuestra nación independiente.

Recordamos en la primera entrega las difíciles condiciones que enfrentaba la mujer en la época colonial para acceder a las mismas oportunidades que los hombres. La mujer estaba sujeta a una serie de restricciones y condenadas, casi todas, a dedicarse a las labores del hogar y a cumplir con los mandatos de la religión.

A pesar de ello, el destacado papel que jugaron durante el proceso de la independencia nacional debe ser formalmente reconocido. Su arrojo y valentía las llevó a desempeñarse como mensajeras mediante un sofisticado sistema que fue capaz de evadir a las duras medidas de control y revisión que impuso el ejército realista.

Ellas también fueron un importante soporte en el campo de batalla, auxiliando a los heridos, proveyéndoles de alimentos y agua, desarrollando labores de inteligencia y combatiendo al lado de los hombres y haciendo prácticamente todo lo posible y necesario por obtener la independencia nacional.

Recordamos el papel de Josefa Ortiz de Domínguez como una activa participante en las tertulias conspiratorias y como la pieza clave que mandó el aviso de que la conspiración había sido descubierta, fue la llama que encendió la antorcha de la libertad.

Nos referimos también a la valiente luchadora Gertrudis Bocanegra que desarrolló acciones de inteligencia a través de la sociedad secreta de Los Guadalupes, a Mariana Rodríguez del Toro como la impulsora de Conspiración del año 11, a María Petra Teruel de Velazco que ofreció socorro y apoyo financiero a los insurgentes y a Leona Vicario, luchadora y periodista que supo defender con heroísmo el papel de las mujeres en la guerra ante la desacreditación que pretendían algunos personajes.

Rita Pérez, la esposa del guerrillero del Bajío y de los Altos de Jalisco Pedro Moreno, enfrentó la terrible realidad de la guerra. Su hija María Guadalupe fue hecha prisionera por un jefe realista, vio morir a su hijo Luis, el 10 de marzo de 1817, mientras enfrentaba a los realistas. Rita Pérez de Moreno, embarazada, fue hecha prisionera junto con sus pequeños hijos en agosto de 1817, estuvo presa en León y en Silao donde su pequeña hija Prudencia, de un año un mes, muere de hambre y luego muere también su hijo Severiano, de dos años y medio, victima de maltratos y, en octubre de 1817 recibió la noticia de que los realistas habían matado a su esposo.

Rita Pérez de Moreno fue liberada en 1819 por instrucciones del virrey Juan Ruiz de Apodaca, fue despojada de sus bienes y regreso a Lagos en donde falleció el 27 de agosto de 1861 a la edad de 82 años. Rita Pérez de Moreno se encargaba de cocinar y de curar a los insurgentes y fue también, administradora del movimiento.

María Josefa Marmolejo García fue una mujer indígena de León que contrajo matrimonio con Ignacio Aldama, un destacado abogado. Desde el inicio de la lucha insurgente ella y su esposo se mostraron afines a la causa. Ella junto con las hermanas del cura Hidalgo y otras mujeres buscaron protección en el convento de la Concepción en San Miguel el Grande y hasta ahí recibieron las recriminaciones de Manuel Flon quien les exigió información sobre el paradero de los caudillos.

María Josefa Marmolejo García animó a los insurgentes cuando fueron derrotados en Aculco, en noviembre de 1810, a no deponer las armas y a mantenerse en pie de lucha, desafortunadamente existen pocos datos de esta mujer.

Manuela Medina tuvo como escenario de sus acciones en pro de la causa insurgente la región de Taxco, ella contó con su propia compañía de 60 soldados y luchó al lado de José María Morelos y Pavón en Oaxaca y Acapulco. La Suprema Junta Nacional Americana o Junta de de Zitácuaro la nombró capitana, ganó siete batallas y se cuenta que Morelos llegó a expresarse así de ella: “…Ojalá que la décima parte de los americanos tuvieran el mismo sentimiento, ya habríamos ganado la guerra…”

Manuela Medina, de origen indígena, encontró en el movimiento insurgente la posibilidad de reclamar las injusticias cometidas contra los pueblos sometidos a rudos trabajos y malos tratos. Murió de 42 años en Texcoco por complicaciones provocadas por unas heridas de lanza durante a guerra en marzo de 1822 en condiciones de miseria y sin reconocimiento por su participación en la lucha insurgente.

Juana Guadalupe Arcos Barragán fue una de esas mujeres que luchó a la par de los hombres por nuestra libertad. Se incorporó a la insurgencia luego de que mataron a su familia, ella organizó a un grupo de campesinos y se unió a José María Morelos y Pavón. Su comportamiento heroico le permitió avisar de la proximidad de las tropas realistas en el sitio de Cuautla; luego de la muerte de Morelos continuó en pie de lucha por algún tiempo.

Antonia Nava de Catalán “La Generala” luchó al lado de Nicolás Bravo y de José María Morelos, destacó por su arrojo y valentía, por avituallar a las tropas y curando a los heridos. Siempre se mantuvo en pie de lucha al lado de su esposo el capitán Nicolás Catalán.

Antonia Nava estuvo presente en Iguala cuando Agustín de Iturbide presentó el plan de las tres garantías el 24 de febrero de 1821. Ella y su esposo sobrevivieron a la guerra de independencia.

Altagracia Mercado, la heroína de Huichapan en el actual estado de Hidalgo. Ella conformó su propia compañía y financió con sus recursos las armas y el sustento del grupo.

Se mantuvo en pie de lucha hasta 1819 cuando fue derrotada, por su valentía se ganó el respeto del comandante español que ordenó fusilar a todos los hombres del regimiento de Altagracia, pero expresó: “A ella no, mujeres como ella no deben morir”.

María Tomasa Esteves se unió a la insurgencia luego de la muerte de su marido a manos del ejército realista. Destacó por su labor atendiendo a los enfermos y desarrolló labores de inteligencia en beneficio de la causa independentista.

Combatió mano a mano con los líderes de la guerrilla insurgente en el Bajío: Andrés Delgado, Albino García y el cura Rafael Garcillita. Fue capturada y murió fusilada por los realistas el 9 de agosto de 1814.

En Pénjamo, en 1814, fueron arrestadas unas 300 mujeres acusadas de sedición y de colaborar en favor de la causa insurgente en un episodio de causó fuerte impacto y disgusto. Entre ellas Manuela Suasto, Petra Arellano, María Bribiesca, Francisca Uribe, Luisa Lozano, Casilda Rico, María Regina Barrón.

La mayoría de esas mujeres habían ofrecido socorro a los enfermos en improvisados campamentos, transmitían mensajes, traficaban armas, les ofrecían agua a los insurgentes o los apoyaban emocionalmente.

María Ignacia, la güera, Rodríguez de Velazco fue una controvertida mujer criolla que impulsó el proyecto independentista desde su inicio, se dice que proporcionó recursos económicos a Miguel Hidalgo y que al final de la guerra impulsó el proyecto trigarante de Agustín de Iturbide con el que se alcanzó la Independencia Nacional en septiembre de 1821.

Ellas son también algunas de las mujeres fundadoras de nuestra patria mexicana y, este, es un sencillo reconocimiento a su valiente labor. Continuará.

Relación de imágenes

1.- Leona Vicario mostrando un manuscrito que dice “Que vivan mis hermanos insurgentes Leona Vicario” detalle del mural Retablo de la Independencia de Juan O´Gorman en el Museo Nacional de Historia.

2.- Josefa Ortiz de Domínguez (1807) Óleo sobre tela. Anónimo, Museo Nacional de Historia

3.- Rita Pérez de Moreno. Imagen tomada de internet.

4.- Manuela Medina. Imagen tomada de internet.

5.- Dos mujeres y un insurgente junto a un cañón de los que se utilizaron en la guerra de Independencia. Obra de Theubeth de Beauchamp.

6.- Detalle del mural Retablo de la Independencia de Juan O´Gorman en el Museo Nacional de Historia.