Anima ingenio poético cubano pabellón de Guanajuato en FIL

* El espacio guanajuatense recibe la presentación de “El parlanchín extraviado”, el más reciente texto del poeta Orlando González Esteva.

* Alberto Ruy Sánchez presenta el volumen coeditado por Artes de México y Ediciones La Rana, que aborda la locuacidad del pueblo cubano.

Guadalajara, Jal., a 6 de diciembre de 2024.- “El parlanchín extraviado”, un compendio de ingeniosos y reflexivos poemas que diseccionan la locuacidad como rasgo de la idiosincrasia cubana, le dio vida este jueves al pabellón de Guanajuato en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara.

El libro del poeta cubano Orlando González Esteva, coeditado por Artes de México y Ediciones la Rana, hizo su debut en México en una animada presentación conducida por el editor y escritor Alberto Ruy Sánchez, tras su lanzamiento en octubre, en la Feria Internacional del Libro de Miami.

Mauricio Vázquez González, director editorial de la Secretaría de Cultura de Guanajuato, abrió la presentación citando una de las perlas del poemario: “Nunca pidas a un cubano que interprete tu silencio. Te sorprenderá descubrir cuántas cosas, sin saberlo, callas”.

Vázquez afirmó que los textos de “El parlanchín extraviado” “son una especie de nuevo género de poesía-aforismo. Cada uno te deja una cantidad importante de sabiduría e información, pues esta locuacidad del pueblo cubano ha tenido grandes representantes”.

Alberto Ruy Sánchez señaló que “el tema recurrente del libro es por qué y cómo los cubanos no pueden parar de hablar” y trazó un retrato de Orlando González Esteva, mencionando que además de escritor, ha sido un músico con una carrera muy importante y una notable capacidad de conectarse con el público gracias a su ingenio chispeante, lo que le ha hecho tener auditorios de hasta 3 mil personas.

“Es un gran poeta”, dijo Sánchez. “Empezó publicando sus poemas con recursos propios, pero después, tuvo la fortuna de que Octavio Paz elogió su trabajo y eso le abrió muchas puertas. Este es el cuarto libro de él que publicamos en Artes de México, ahora en colaboración con Ediciones La Rana”.

La parte más viva de las presentación fue la lectura de los poemas de Orlando González que Alberto Ruy Sánchez hizo frente al público que colmó el pabellón de Guanajuato: una colección de centellas verbales cuya lucidez queda resonando en la mente mucho después de que la sonrisa, cuando no la carcajada plena, asomó como primera reacción.

Una lectura gozosa que inició con: “Hablas dormido, aunque no recuerdes con quienes ni tu mujer parezca adivinarlo. Las horas del día no te alcanzan para satisfacer la cuota diaria de palabras que justifica tu vida”.