Guanajuato, Gto., a 24 de octubre de 2019.- Los participantes más jóvenes del 47° Festival Internacional Cervantino emocionaron a lo grande a las casi 4 mil personas que se dieron cita en la Explanada de la Alhóndiga de Granaditas el pasado martes, durante el concierto de las Orquestas, Bandas y Coros de Guanajuato.
Un total de 150 músicos y voces, de entre 10 y 21 años de edad, procedentes de distintos municipios y seleccionados entre las 28 agrupaciones que conforman el Sistema de Desarrollo Musical del Instituto Estatal de la Cultura, cautivaron a la audiencia con el programa “Los rostros del bolero”, que presentó en formato sinfónico una docena de temas románticos del cancionero popular mexicano.
El experimentado trompetista y director de orquesta guanajuatenses Juan Manuel Arpero, coordinador del programa formativo y musical del IEC, llevó la batuta y arreglos del concierto, que logró conciliar la suave cadencia del bolero con la brillantez y espectacularidad de una gran orquesta, aprovechando los dinámicos acentos aportados por los metales y percusiones.
El único momento quieto de la velada fue su inicio: un suave preludio percusivo hecho con las notas de “Veracruz” y unas cuantas pinceladas expresivas del maestro Arpero en la trompeta, que dio paso de inmediato a “Cuando vuelva a tu lado”, de María Grever, transformada en una dinámica marcha coral.
A partir de ahí, el desfile emocional se desbocó al invocar por partida doble a José Alfredo Jiménez (“Deja que salga la luna” y “Amanecí en tus brazos”) y al servir una explosiva y vibrante versión de “Hoy tengo ganas de ti”, de Miguel Gallardo, a la que el coro sazonó con una línea-manifiesto que terminó por ablandar al corazón más duro: “Somos la generación cantando por Guanajuato”.
El conjunto orquestal no sólo recordó a los clásicos, sino que también sorprendió con su abordaje de temas populares algo más contemporáneos, como “Nube viajera”, de Jorge Massías; “Un hombre normal”, de Espinoza Paz o “Hasta que te conocí”; de Juan Gabriel, cautivante por su contraste entre la melancolía más doliente y la exaltación catártica de su final.
Una tanda de danzones de Agustín Lara sirvió como descanso para el tramo final del concierto, dominado por temas de Armando Manzanero (“No sé tú” e “Inolvidable”), el “Mucho corazón” de Ema Elena Valdemar y una efusiva interpretación de “Como quien pierde una estrella”, de Humberto Estrada.
“Caminos de Guanajuato” se anticipaba como el cierre natural de la presentación, sin embargo, el público entusiasmado obligó a los jóvenes músicos y cantantes comandados por Arpero a permanecer en el escenario y ofrecer de nuevo “Como quien pierde una estrella” y a recibir la aclamación final junto con su cuerpo de maestros.
Preparado a lo largo de más de tres meses en el Centro de las Artes de Guanajuato, este fue el concierto más ambicioso del año para el Sistema de Desarrollo Musical del Instituto Estatal de la Cultura, conformado por 28 orquestas, bandas, coros y grupos de cámara repartidos en 27 municipios y en los que se preparan musicalmente más de 2 mil niños y jóvenes.